Shitty Radio: la emisora que suena como si la hubieran armado en un sótano con Wi-Fi robado, pero que igual te hace mover la cabeza. Aquí no hay reglas ni buen gusto confirmado —solo una tormenta random de urban music, hip hop, trap y lo que el algoritmo escupió a las 3 a.m. Ideal para quienes disfrutan ritmos callejeros, beats sucios y letras que harían llorar a tu abuela. Es caótica, desordenada y probablemente mal configurada… pero maldita sea, suena bien.